MESA, SALUD DROGAS Y VIOLENCIA

Objetivo de la Mesa

El Objetivo es generar un ámbito de estudio, intercambio y denuncia sobre las situaciones de violencia que se generan por el consumo en exceso tanto de drogas legales como ilegales, resolviendo entre las diferentes organizaciones participantes un plan de acción conjunto tendiente a encontrar las raíces de los conflictos que llevan al ser humano a su dependencia.

Encuadre

1) Prohibicionismo o Legalización ¿Cuáles son las consecuencias, avances o retrocesos que podrían darse en un escenario de Legalización?
Según un informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), el órgano de la ONU para temes de drogas: “El mundo se droga cada vez más, sin importarle si lo que consume es legal o ilegal” pero que determina lo legal de lo ilegal, en ese sentido encontramos serias contradicciones en el poder legislativo; “El derecho de uno termina donde empieza el derecho de los demás”, por tanto “el derecho de los demás termina donde empieza el de uno”. Pero como se enfatiza en la primera y no en la segunda frase, todo hace sospechar que los sostenedores de tal planteo se mencionan a sí mismos como “los demás”, es decir como representantes de los demás, como representantes de un sistema establecido que se da por justificado. “El Paisaje Humano” Cap. X La Ley , Silo.
Con respecto a la política vigente en Argentina desde el Poder Ejecutivo, la encontramos aferrada al “Prohibicionismo”, o peor aún, a la “Guerra contra las Drogas”, allí comprobamos diferentes formas de violencia generadas por el Estado al quedar encadenado a una política exterior impulsada desde los EE.UU. a comienzo del siglo XX.
2) Dispositivos Socio-Sanitarios ¿Qué aporte nos brinda hoy un abordaje en Reducción de Daños y Riesgos? ¿Por qué es resistido desde el oficialismo en Argentina? “Muchos adictos a las drogas no comparten el –deseo de abstinencia- de los profesionales y abandonan los servicios asistenciales; otros consumidores de drogas, dependientes o no, ni siquiera acuden a los servicios porque consideran que la oferta que se les hace no coincide con sus deseos o necesidades.
En consecuencia, aumenta la distancia entre los consumidores de drogas y los recursos potenciales de salud pública, con el riesgo de ampliar los estados de marginalización de los consumidores, encerrados en grupos de iguales y alejados de las redes sociales normalizadas de su entorno más próximo.
Simultáneamente, aparecen nuevas sustancias y nuevas formas de consumo, que adoptan características propias y requieren modalidades de prevención adaptadas a los contextos donde se consumen y a sus consumidores.
La percepción de estos hechos provoca el interés en buscar nuevas estrategias de comunicación con los consumidores de drogas, en un intento de diseñar e implantar múltiples y distintos programas de prevención y de tratamiento adaptados a sus potenciales necesidades.
Actualmente está ampliamente aceptado que para que una política sanitaria en drogodependencias sea coherente y eficaz debe tener en cuenta, al mismo nivel, distintas estrategias con los siguientes objetivos:
Disminuir la entrada a la adicción, disminuir los riesgos asociados al consumo, favorecer la superación de la adicción”
-Políticas e Intervenciones de Reducción de Riesgos, Delegación del Gobierno para el Plan sobre Drogas (España)
3) Salud privada y Salud pública “Nuestro cuerpo es… nuestro, no del Estado” Editorial Nº 4 Revista THC, nos acercamos a un aspecto de resolución individual y al dilema del derecho a elegir sobre el propio cuerpo, pero ¿qué pasa cuando tenemos un mercado saturado de venta y distribución de “Paco” PBC (pasta base de cocaína), droga extremadamente tóxica, no apta para consumo humano? Nos estamos alejando del uso de drogas recreativas, para pasar al uso de sustancias exterminativas?
Visto el daño personal y social que provoca, merece especial atención y la suma de aportes y avances que se pudieran haber obtenido desde la aparición de este nuevo fenómeno.

alejandra_paiz@yahoo.com.ar